En los últimos dos años, se han adoptado nuevas costumbres y formas de vida; los hábitos adquiridos se han arraigado fuertemente en la sociedad. Muchos no quieren regresar a las oficinas, otros prefieren volver apenas unas horas a la semana, y sin lugar a duda, las compras por internet llegaron para quedarse. El mundo cambió y tendremos que adaptarnos a nuevas dinámicas.
Fotografías y contenido: Cortesía ACAI
La realidad post pandemia, supone para todas nuevas formas de relacionarse con los espacios habitables, ya sea, la casa, la oficina o el lugar de trabajo, los restaurantes, centros educativos, comerciales y de salud.
¿Cómo serán estos espacios luego de la pandemia? ¿trabajaremos de forma híbrida?, ¿volverán los espacios de trabajo a ser los mismos que antes?, ¿Y la casa, cambió definitivamente? ¿seguiremos trabajando desde casa? ¿Cómo lograr atraer a los empleados para que regresen a las oficinas? ¿Y las comunidades otra vez a los centros y locales comerciales? Son muchos los cuestionamientos que a diario se hacen los diseñadores de interiores, constructores, arquitectos buscando siempre suplir y atender a las necesidades de los individuos, de las comunidades.
Las 37 firmas de arquitectura, diseño y construcción, miembros de ACAI se reunieron, reflexionaron y propusieron una revisión en cuanto a la concepción o creación de espacios, para entender hacia donde este apunta y así poder dar a conocer cómo serán las tendencias para el 2022.
Proyectos centrados en los seres humanos y en su bienestar
El diseño y la arquitectura interior ponen en primer lugar al ser humano, desde lo emocional, social, espiritual, profesional, e incluso desde la salud. El entorno construido debe generar bienestar; creando espacios que inviten a realizar actividades sanas, con ventilación natural, a alimentarse bien y generar hábitos saludables. Se busca entender a los usuarios, conocer quienes son, qué quieren y cuáles son sus aspiraciones y sus dolencias.
Equidad social
Los diseños de espacios deben ser destinados y pensados en conceptos como la salud, la inclusión, y en la capacidad de generar bienestar en las personas. Los arquitectos tienen el compromiso de generar valor social en sus proyectos. El componente social permitirá más fácilmente atraer a la gente a las oficinas, a los centros comerciales y locales.
Regreso a lo esencial
Se prefiere lo sencillo, lo natural, lo básico. Cada espacio debe tener lo necesario, sin desperdicio. Se aprecian colores claros, neutros, tranquilos; y si hay acentos de color, sin estridencias. Se prefieren materiales y fibras naturales, maderas claras.
El pasado tiene futuro
Se retoman elementos de épocas pasadas especialmente en temas de materialidad. El vidrio, el espejo, el vinilo, el bronce, el cromo adquieren vigencia. El desarrollo de la industria del vidrio y el espejo permite lograr que estos productos luzcan variadas gamas de colores que se complementan, realzan, dan luminosidad e importancia al espacio. También los murales, revestimientos de papel o los papeles de colgadura, incluso los vinílicos hacen parte de los nuevos espacios de vida. Los tonos dorados y cobrizos, reminiscencia del pasado, toman protagonismo.
Tecnología, la punta de lanza
Las nuevas tecnologías arrasan en el diseño interior. En los porcelanattos, e incluso los vinílicos, permiten formatos de grandes dimensiones. De igual manera, la tecnología ha logrado que las impresiones y serigrafías imiten a la perfección las piedras, mármoles y maderas naturales, y que, junto con las ventajas de mantenimiento y comportamiento de estos materiales, en relación a los originales, ha ocasionado que estas imitaciones se hayan vuelto infaltables, en los espacios interiores.
Los espacios también se diseñan con tecnología. La domótica se sofistica aún más, las redes inalámbricas ganan terreno. Ya no hablaremos del Wi Fi sino del Light Fi, la transmisión de la señal a través de la luz. El celular: indispensable, es el comando central en esta aventura tecnológica que permite facilidad de uso y eficiencia. IOT o la inteligencia de las cosas, aplicada al espacio y vivienda.
Foco a la iluminación
Las luminarias, además de ser utilitarias, de cumplir un rol funcional, se convierten en esculturas de luz, casi en piezas de arte. Gracias al diseño, las luminarias llegan a adquirir un lugar preponderante en los espacios habitables. El confort y la flexibilidad marcan también la tendencia en la iluminación. Se encuentran luminarias que no incrementen la temperatura, que permiten un manejo amigable gracias a las aplicaciones, con múltiples opciones y tonos, con miniaturización de sus elementos y que sean de fácil instalación.
Sostenibilidad a tope
La sostenibilidad va más allá del compromiso con el medio ambiente, es también con las comunidades, con las personas. El diseño y la arquitectura interior tendrán que incorporar la sostenibilidad en sus proyectos. Ya no es solo buscar que el ‘edificio’ no haga daño, sino cómo hacer para que aporte al medio ambiente y a la comunidad.
Conexión con la naturaleza
La biofilia supone la necesaria unión con la naturaleza, relación básica para todo ser humano. El amor por la naturaleza, por las plantas, sigue más vigente que nunca. La inclusión de verde y plantas en los espacios interiores genera bienestar. La naturaleza no puede faltar en los nuevos espacios de vida.
Apoyo a lo local
Al optar por materiales e insumos locales, no sólo se ahorra en transporte, también se evita generar contaminación ocasionada por el desplazamiento de productos, y además se propicia el trabajo, el empleo y la industria del lugar, con el fin de mejorar el desarrollo económico local y generar un impacto social. Si la oferta existe, se pensará primero en buscar el recurso local, nacional.
Artesanía, nuestra identidad
Los materiales y técnicas artesanales entran a jugar un papel destacado en los espacios interiores. La inclusión de tapetes, cestería, tejidos, y piezas artesanales con alto contenido de diseño, marca fuertemente la tendencia pues otorgan identidad y permiten crear espacios diferenciados. La artesanía con diseño que ya entró con paso firme a la vivienda, ahora también lo hace en los espacios corporativos para darles calidez. Además, está fuertemente ligada al tema social, que también debe tomarse en cuenta a la hora de crear espacios.
Nuevas energías
Las nuevas formas de generación de energía, como la solar, se incluyen en los proyectos, no solo para generar la necesaria para consumo propio, sino también para ofrecer, devolver o entregar el excedente. Es una forma de devolver al planeta lo que una vez se le quitó.
Intercambios en la ‘usabilidad’
Nuevos paradigmas se generan al mezclar los usos. Las oficinas incorporan espacios similares a las salas de una casa, ambientes más amables, empáticos que propician la reunión y el encuentro social. Las casas incorporan zonas de trabajo, a manera de oficina. También ocurre con productos. Elementos de retail o corporativos como pueden ser los rieles de iluminación se llevan a la vivienda. La mezcla de usos también se da en los materiales.
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